Tengo algo que confesar... no me gusta la informática.
¿Y cómo acaba alguien a quien no le gusta la informática haciendo unas prácticas en Dublín?... pues con una serie de casuales peticiones a las que no supe decir que no.
Primero aterricé en el ciclo medio (nocturno, modular), de módulo en módulo (de hecho en tres años hice dos módulos, que uno lo planté porque no me parecía bien el profesor).
La petición correspondiente fue algo como: "Estoy harto de llevar a formatear el ordenador, ¿por qué no te apuntas a un ciclo de informática y así lo haces tú?"
El artífice de la petición, evidentemente, mi marido.
El resultado: no más formateos a tocateja.
El segundo aterrizaje debido a la segunda petición fue en el ciclo superior (diurno, no modular).
La petición correspondiente fue algo como: "Hay muy pocas matrículas para el ciclo superior y tememos que lo quiten, ¿te importaría matricularte?"
La artífice de la petición fue una profe, Carina, mi tutora en aquel primer año del nocturno modular.
El resultado: este blog, entre otras cosas.
No me gusta la informática pero me gusta y necesito tener la cabeza ocupada, aprender cosas, demostrarme que mi cerebro sigue funcionando y respondiendo. Y creo que lo he demostrado.
En algunas ocasiones es bueno no saber decir que no.
Seguro que non es a única que estudia algo que non lle gusta, pero tiveches boas razóns para facelo, e tampouco foi tan mal, non? :)
ResponderEliminarPois seguro que non, pero dame a impresión de que o resto de xente que estuda algo que non lle gusta polo menos responderá máis ao perfil de estudante e estuda "porque lle toca". Así sen motivo e sen gustar... algo rariña si que son ;)
ResponderEliminarE non, non foi tan mal, e, o mesmo que coa miña carreira universitaria, é o camiño o que paga a pena.
Vendo títulos, baratos!
E que formateos máis ricos fai, señores! (Eu creo que a informática non lle gusta a ninguén, en realidade)
ResponderEliminarAlgúns coñezo que ou lles gusta ou disimulan moi ben. Pero eso si, formateos coma os meus... nin querendo :D
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